Esperan respuestas. Ana Elizabeth y Paula Lineth, las siamesas que nacieron el pasado 2 de agosto y que están unidas por la pelvis, vena aorta y otros órganos, siguen delicadas, pero estables.
Pablo Pinto, padre de las niñas, dijo que solo les queda esperar la voluntad de Dios y recibir una respuesta del hospital de los Estados Unidos a ver si se encargan de la cirugía que las separará.
Ellos son conscientes de que una de las pequeñas está más delicada que la otra, pero quieren que ambas vivan sin importar la apariencia física que tengan al final de la cirugía.