Cuando los niños ya empiezan a gatear o caminar, es importante mantenerse alerta y tomar algunas precauciones para evitar el peligro. El bebé comienza a explorar el mundo y aumenta su curiosidad. Los padres son responsables de evitar: Caídas, intoxicaciones, quemaduras, heridas y asfixias.
EN CASO DE ACCIDENTES, ES IMPORTANTE:
-Conservar la tranquilidad, para no asustar al niño y conseguir así su colaboración.
-Evite hacer algo de lo que no esté seguro.
Mantenga al niño alejado de almohadas, bolsas plásticas, cortinas, para evitar asfixias. Nunca deje al menor solo en la cama, en el sillón o la tina de baño porque puede darse vuelta.