Palo de agua en Lídice

Aterrados. Quince viviendas afectadas y una población temerosa de que todo vuelva a ocurrir fueron el resultado de una inundación en Lídice, Capira, la tarde de ayer.

Moradores del lugar dijeron que todo comenzó con un torrencial aguacero en las montañas de Capira y al poco tiempo observaron como el río Perequeté crecía y crecía sin ningún control, por lo que llamaron al Sistema Nacional de Protección Civil (Sinaproc).

Marlenis Morales, una moradora del lugar, dijo que sucedió lo mismo que hace más de tres años, por lo que exigen una respuesta de las autoridades del Ministerio de Obras Públicas (MOP), quienes, según los afectados, no terminaron los trabajos de dragado del río.

Se pudo observar cómo las personas sacaban el agua de sus viviendas con escobas y trapeadores, mientras miraban al cielo por la lluvia que arreciaba de repente.

María Cedeño, otra moradora, explicó que el agua entró tanto por la puerta de atrás como por la de adelante y no pudo hacer nada para detenerla, al punto que la ropa de su bebé se le mojó en su totalidad.

En la mayoría de las casas, el agua subió poco más de un pie de altura hasta que de pronto el aguacero terminó y el agua comenzó a bajar.