Verdaderas víctimas del accidente. Son 27 niños, niñas y adolescentes entre las edades de dos a 15 años que ahora les hace falta el apoyo de una madre y un padre.

Julián Rivera, director de Protección Social del Ministerio de Desarrollo Social (MIDES), afirmó que han ido casa por casa de las víctimas para hacer un censo sobre la cantidad de adolescentes en orfandad, producto del accidente ocurrido el pasado jueves 13 en la vía Panamericana cuando un camión volquete chocó un auto y un bus.

"Estamos haciendo una evaluación socioecómica para ver la situación de cada familia. Es importante que los hijos de las víctimas tengan la oportunidad de desenvolverse como los demás", aseguró.

TESTIMONIOS

"Algo adentro de mi corazón me decía que algo le ocurría a mi hermano", afirmó Sotera Valdés, hermana de Isidro Valdés, quien falleció en el trágico accidente de Las Garzas. Sotera vive en la 24 de Diciembre, en el sector de Caminos de Omar. A las 11:00 p.m., escuchó las sirenas. "Pensé que era la policía persiguiendo a los maleantes. Después decidí no ver las noticias, porque siempre dan cosas feas", expresó.

Se acostó a dormir, pero no logró conciliar el sueño, pues algo le decía que su hermano estaba en peligro. No fue sino hasta la mañana del viernes cuando la llamaron unas amistades para informarle lo ocurrido. Grande fue la sorpresa que se llevó al prender el televisor y ver la imagen de cuando llevaban a su hermano dándole respiración cardiopulmonar (RCP).

La noticia de que estaba entre los heridos le dio tranquilidad a su alma, pero minutos después Isidro murió.

Él trabajaba en la empresa Toledano, ubicada en Rana de Oro de Pedregal y ese día su turno terminó al mediodía, pero quiso redoblar para ganar dinero extra y terminar unas mejoras en su casa.

Días antes Isidro había enviado a su esposa Marina González y a su bebé de dos años hacia Cañazas, en Veraguas, para que visitara a los padres de ella, pues tenía tiempo que no los veía. Y aunque han tratado de informarle por medio de la radio, ella no sabe que su esposo falleció.

La semana anterior, Isidro había llamado a Sotera para decirle que iba a viajar hacia Rincón de Las Palmas de Veraguas, a visitar a su padre, José Juan Valdés y celebrarle sus 56 años.

"El quería que fuera una sorpresa, porque tenía tiempo de no verlo", aseguró Sotera.

Pero la familia en Santiago se enteró a través de las noticias en la radio y de inmediato los hermanos de Isidro abordaron un bus hacia la capital, para comprobar la mala noticia.

Los hermanos Valdés expresaron que su madre Bárbara García está muy afectada y que mañana trasladarán el cadáver hacia el interior.

TRISTE ESPERA

Los esposos Cruz terminaron su jornada de labor como de costumbre. Celideth González, esposa de José Nicolás Cruz, se fue a su casa, porque su esposo iba hacia el Mercado de Abasto a comprar mercancía.

"Lo esperé un rato y luego decidí irme a acostar, por lo que dejé la luz de afuera prendida. Cuando desperté, eran como las 2:00 a.m. y apagué la luz, él no había llegado", manifestó Celideth.

Después, unos vecinos la llamaron para darle la mala noticia. La señora está destrozada y trata de darle ánimos a sus dos hijos. En total, Cruz tenía cuatro hijos, pues dos eran de su primer matrimonio, que también quedaron huérfanos.

En tanto, amigos de Luciano Reyes Salinas, otra víctima del accidente, expresaron que él laboraba como guardia de seguridad. Ireno Carpintero dijo que era chiricano y pertenecía al grupo musical de la iglesia de Dios.

"NUNCA ME CONTESTO"

"Cuando vi las noticias empecé a llamarlo y llamarlo, pero nunca me contestó", dijo con dolor Hilaria de Jiménez, refiriéndose a su esposo Marcelino Jiménez , quien viajaba en el bus accidentado con su hijo, del mismo nombre, después de una jornada de trabajo.

Hilaria contó que fue por medio de la televisión que se enteró del accidente. Temiendo que ocurriera lo sucedido, marcó al celular de su esposo, pero éste no le contestó. "Siempre cuando lo llamaba y no me contestaba, me devolvía la llamada, pero esta vez no lo hizo", relató la señora.

Según explicó un familiar, el hijo de la pareja, de siete años, está traumado, pues recuerda con claridad el momento en que su padre lo lanzó del bus para salvar su vida.

Hilaria ahora no sabe que hará para sustentar económicamente a su familia, compuesta por cinco pequeños, pues Marcelino era quien llevaba el pan de cada día.

ATENCION

La esposa de Isidro no está enterada de la muerte de su esposo. Ellos han hecho el llamado a través de la radio.