
Los niños y niñas necesitan grandes dosis de amor para crecer sanos emocionalmente. Usted puede empezar hoy a amarlos más que ayer.
Los niños y niñas necesitan grandes dosis de amor para crecer sanos emocionalmente. Usted puede empezar hoy a amarlos más que ayer.
Los niños y niñas necesitan grandes dosis de amor para crecer sanos emocionalmente. Usted puede empezar hoy a amarlos más que ayer.
Los niños y niñas necesitan grandes dosis de amor para crecer sanos emocionalmente. Usted puede empezar hoy a amarlos más que ayer.
Los niños y niñas necesitan grandes dosis de amor para crecer sanos emocionalmente. Usted puede empezar hoy a amarlos más que ayer.
Los niños y niñas necesitan grandes dosis de amor para crecer sanos emocionalmente. Usted puede empezar hoy a amarlos más que ayer.
Los niños y niñas necesitan grandes dosis de amor para crecer sanos emocionalmente. Usted puede empezar hoy a amarlos más que ayer.
Cualquier persona diría, con toda seguridad, que para bajar la temperatura, en caso de fiebre, se deben tomar un par de analgésicos y acudir al médico. Pero, ¿cuántos gramos de amor hacen falta para crecer emocionalmente de manera equilibrada, curar una enfermedad o para permanecer saludables?
Lo anterior se desprende de ‘Ayudando a crecer’, un manual que contiene información de referencia sobre el desarrollo integral de niñas y niños menores de seis años, preparado por la Organización Panamericana de la Salud hace algunos años, dirigido a periodistas y medios de comunicación de América Latina como una herramienta básica y bajo numerosas revisiones por parte de profesionales de la salud, de la comunicación y del periodismo.
Los padres y madres que se preocupan por la salud de sus hijos, intentan, en la medida de sus posibilidades, satisfacer casi todas sus necesidades básicas. Es cierto que los niños y niñas necesitan todas estas cosas, pero necesitan también de atención, manifestaciones de afecto, seguridad, protección y grandes dosis de amor de su padre, madre, sus familiares y de la comunidad. Crecer en un ambiente de seguridad afectiva es un ingrediente básico de la salud integral de los niños y las niñas y para la construcción de sociedades más armónicas.
Haga cambios
Cada día más
1. Afecto
Las manifestaciones de cariño hacen que el niño desarrolle al máximo sus potencialidades.
2. Valoración
La seguridad emocional, unida a reforzadores positivos, ayuda a niños y niñas a fortalecer su autoestima y a confiar en sí mismos.
3. Emociones
Un niño emocionalmente estable, aprende a manejar mejor sus ansiedades y miedos.
4. Autoestima
Un niño con una autoestima fortalecida será un joven y adulto menos sujeto a las presiones de grupo, capaz de aceptarse y expresarse.
5. Disciplina
Un niño que crece en un ambiente de reglas bien definidas y disciplina positiva (sin castigo físico) practica valores y respeta a los otros.
Receta
Los niños que se sienten queridos y que disfrutan de refuerzo afectivo grato y continuo se enferman menos
Si se enferman, se recuperan más rápido que quienes no cuentan con ese refuerzo en sus familias o han sido abandonados.