Un profundo hueco ubicado cerca de las oficinas de Enlace del MIVI en Arraiján dejó una empresa privada al momento que realizaba la instalación de una tubería de 26 pulgadas de diámetro, lo que se ha convertido en un criadero de mosquitos.

Según María Huertas, residente del área, han reportado el problema en múltiples ocasiones al Instituto de Acueducto y Alcantarillados Nacionales (IDAAN), pero se les informó que el daño le corresponde a una empresa privada que se encargó del proyecto de instalación de tuberías como parte de las obras complementarias de la potabilizadora Laguna Alta.

Mientras se tiran la pelota, los residentes siguen temiendo.