Nadie se pone de acuerdo, porque los transportistas están seguros de que en un mes sus vehículos no tendrán los gobernadores de velocidad. Las empresas consultadas por este medio aseguran que no se venden aquí y el Gobierno no dice ni esta boca es mía con respecto a las sanciones que impondrá si los susodichos reguladores no están instalados en el plazo anunciado.
Mientras tanto, siguen las regulaciones para los conductores de camiones. Desde tempranas horas de ayer, mediante los operativos de la Autoridad de Tránsito y Transporte Terrestre (ATTT) se pusieron 112 boletas a transportistas que tenían licencias inadecuadas y otras faltas al Reglamento de Tránsito.
¿SECRETO DE ESTADO?
En tanto, los gobernadores de velocidad serán un artefacto que estará regulado por la ATTT, pero hasta el momento las autoridades del Gobierno no han revelado dónde conseguirlo para los vehículos que no lo tienen y quién los instalará.
DE YA PARA YA, ¡NO!
Rosa Pérez, presidente de la piquera de buses de Don Bosco, manifestó que en 30 días no habrá ningún bus transitando por la vía, porque instalar gobernadores de velocidad no es una cuestión que se hace de hoy para mañana.
"Se necesitan mecánicos especiales y no hay. La verdad es que desconocemos de lo que se trata y cuánto cuestan", dijo.
Afirmó que la única manera de que se regule la velocidad en los vehículos es poniendo boletas ejemplares y reteniéndoles las licencias a los conductores y no dejándolos manejar. Lastimosamente, esa medida es imposible, dijo Pérez.
BUENO, PERO CON CIERTAS PAUTAS
Por otro lado, distribuidores de carros del país, que fueron consultados por este medio, coinciden en que ven con buenos ojos la iniciativa de instalar los gobernadores de velocidad, pero hace falta que se investigue más, porque al hacer cambios en los automóviles hay que reestructurar otras piezas en la máquina.
Hasta el momento, no tienen conocimiento de que en Panamá haya esta pieza.
SI LO PONE EN PRACTICA
Entretanto, José Luis Rodríguez, quien labora en la ruta de buses de David-Panamá, manifestó que la aseguradora que trabajaba con ellos, les exige el gobernador de velocidad. Éste viene de fábrica.
"Nosotros lo tenemos hasta un tope de 95 kilómetros por hora, y en varias ocasiones, cuando vamos en bajada, la luz se prende y las personas se dan cuenta de que la velocidad aumentó más de lo indicado", aseguró Rodríguez.
Eso quiere decir que los pasajeros pueden estar al tanto de cómo conduce la persona en cuyas manos han puesto sus vidas.
DIALOGAN
La ATTT aún no tiene con exactitud cuánto será la sanción para el conductor que no cuente con el artefacto.