
La guerra entre autoridades educativas y la dirigencia magisterial parece no acabar.
Foto ILUSTRATIVA
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Ayer, la ministra de Educación, Lucy Molinar, les recordó a los docentes que no se darán clases dos sábados para recuperar las clases perdidas los días 28 y 29 de julio, cuando se realizó la huelga.
Molinar aseguró que con esto solo se castigará a los padres de familia y a los alumnos, por una huelga que nadie les preguntó si querían participar.
Según el maestro Luis López, antes de irse al paro, ellos les dejaron a los estudiantes el contenido a desarrollar durante estos dos días y que la ministra quiere realizarle un descuento que es ilegal.
López aseguró que Molinar busca que los directores de los colegios les coloquen a los maestros que asistieron al paro una ausencia injustificada para poder realizar el descuento, pero de recurrir a este medida los dirigentes magisteriales entonces procederán legalmente contra la titular de Educación.