Unos contentos, otros tristes. Desde hoy empezarán a regir los nuevos precios de la paridad del combustible para el mercado doméstico, y que se mantendrán bajo estos costos hasta el 1 de septiembre.

Los consumidores de la gasolina sin plomo de 95 octanos tendrán un aumento de un centésimo.

Por su parte, los de gasolina de 91 octanos verán una disminución, ya que sus precios bajaron dos centésimos.

Los buses y automóviles que usan diesel liviano deberán amarrarse más fuerte sus pantalones, puesto que se reflejó un incremento de cuatro centésimos.

Quienes usan querosín para encender sus guarichas (sobre todo si quieren ahorrar luz) también verán un aumento, ya que subió tres centésimos.

En el gas licuado, el cilindro de sesenta libras aumentó a sesenta y nueve centésimos por cilindro, mientras que el cilindro de 100 libras se incrementó a B.1.15 por cilindro.