La casa quedó como si hubiese pasado un huracán por el lugar. (Foto: Yodalis Bethancourt / EPASA)
Yodalis Bethancourt
| P. Oeste, DIAaDIA
Las casos por violencia doméstica en Panamá Oeste registran 172 casos en lo que va del año. El distrito de La Chorrera es el que más casos registra con 135.
Dos miembros de la Policía Nacional se encuentran bajo investigación al participar en un caso de violencia doméstica y otro por amenaza con arma de fuego, ocurridos esta semana en el distrito de La Chorrera. Ambos laboran en la capital.
El caso de violencia doméstica ocurrió el lunes en horas del mediodía en la comunidad de El Progreso, en Puerto Caimito de La Chorrera, en donde un Cabo Iero. llegó como enloquecido a la casa que comparte con su esposa y dos hijos y destruyó todo.
Destrozó los vidrios de todas las ventanas, dañó las puertas de la casa, quebró el inodoro, el lavamanos, la puerta de vidrio del baño, el comedor, el juego de sala, lanzó al suelo dos televisores, en fin, hasta lo que había en el cuarto de sus hijos lo destruyó.
Esta pareja tiene 12 años de matrimonio y dos hijos: una niña de 4 años y un varón de 10, quienes afortunadamente no se encontraban cuando su padre llegó y por motivos desconocidos destruyó todo lo que encontró a su paso.
Los vecinos dieron la voz de aviso a la Policía Nacional, que enseguida acudió al lugar y condujeron a su compañero hasta la sede policial, en donde permaneció hasta el martes, ya que el hombre fue enviado a la Dirección de Responsabilidad Profesional.
Según se pudo conocer no es la primera vez que este policía se torna violento con su familia, incluso el día de los hechos empezó en la casa de su madre, ubicada en El Harino, donde le destruyó los vidrios a dos carros de su propiedad.
VIOLENCIA CONTRA PASAJERA Y TAXISTA
Un teniente es el involucrado en el caso de amenaza con arma de fuego, quien al llegar al estacionamiento de un supermercado en La Chorrera, el sábado en la noche, pidió una carrera a un taxi, pero se enojó porque el conductor le dijo que no podía llevarlo porque había una señora a bordo que lo había llamado por teléfono.
Según la pasajera Vielka de Loaiza, el teniente empezó a decirle palabras obscenas al taxista, por lo que este se bajó del auto y el Policía hizo dos detonaciones, lo cual provocó que el caso pasara a la Corregiduría Nocturna y los afectados fueran sancionados.
La versión del teniente es que el taxista le faltó el respeto y por eso hizo las dos detonaciones, aunque fue acusado de haber pateado la puerta del taxi y haber apuntado a la dama con su arma y hacer las detonaciones sin motivo alguno.
POLICIA SE DISCULPA E INVESTIGA
El comisionado Marco Antonio Córdoba, jefe de la Zona de Policía de Panamá Oeste, atendió ambos casos y se disculpó con la afectada en nombre de la institución policial, al tiempo que remitió ambos casos a la Dirección de Responsabilidad Profesional que es la instancia encargada de investigar estos casos y buscarle la solución al problema.
Una vez que la víctima es agredida y llega al sector Salud se le llena un documento por sospecha de violencia doméstica, que es referido dentro de las 48 horas a la Medicatura Forense. Si son menores de edad, pasan al Juzgado del Menor y la Adolescencia y la víctima debe interponer la denuncia, pero la mayoría no llega a hacerlo.
En el caso de violencia doméstica, hasta el día martes cuando ya habían pasado 24 horas del hecho, la afectada no había presentado la denuncia, pero aun así la Policía Nacional empezó las investigaciones por la parte disciplinaria.
El comisionado Córdoba dijo que los casos de violencia doméstica no sólo afectan a la familia uniformada, ya que involucra a todos y es una situación que hay que tomarle la atención debida para evitar el deterioro de la familia y que terminen en situaciones fatales.