¡A empacar maletas! La Selección Nacional de Baloncesto de Panamá volvió a sucumbir ayer, al caer por tablero de 61-78 ante el anfitrión Japón en el XV Campeonato Mundial que se juega en el país nipón.

Con este revés, la representación criolla quedó en la cuerda floja y está obligada a ganar sus dos partidos restantes, para después esperar una ayuda ajena y así poder al menos soñar con los octavos de final.

Los panameños lucieron tan mal, que apenas acertaron un tiro en los últimos seis minutos y medio del encuentro y perdieron 27 balones.

El canastero nipón, Kei Igarashi, anotó 18 puntos y Japón se robó 16 balones para lograr su primera victoria en tres desafíos; mientras que Rubén Douglas marcó 16 para volver a ser el mejor por Panamá.

Los dirigidos por el argentino Guillermo Vecchio, siguen de capa caída y en la madrugada de mañana necesitarán un milagro cuando enfrenten a la Alemania del baloncestista de la NBA, Dirk Nowitzki.

Vecchio dijo ayer a Deportes EPASA que nunca había trabajado con tanta desorganización.

SIN EXCUSAS

Vecchio reconoció ayer la superioridad de los rivales y dijo que la llegada tarde de los legionarios ha afectado al equipo que no ha logrado acoplarse.