La madre de Daniel lloraba desconsolada. Minutos antes de su muerte ella estuvo orando con él. (Foto: Edwin Navarro / EPASA)
Milagros Murillo F.
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Él estaba cambiando. El pequeño Josué, de 12 años, vio cuando su papá se paró en el borde del precipicio para orinar y cuando volvió a mirar, ya no estaba.
Daniel Herrera Campos, de 32 años, falleció la tarde de ayer cuando se encontraba detrás de su casa ubicada en Kuna Nega, él cayó al río de la comunidad desde unos 30 metros de altura.
La señora María Lucrecia, su madre, lloraba desconsolada, pues Dany, como le decían, vivía con ella, y aunque a veces bebía licor, estaba tratando de cambiar. Prueba de ello, es que participaba de los cultos que realizaban en su casa, la cual funciona como templo Mahanaim.
María contó que Daniel no estaba tomado, había comprado comida, luego se puso a conversar con ella, oraron juntos y le dijo que iba a orinar; después de eso no lo volvió a ver. "Él estaba llorando y yo también, me dijo que él quería cambiar. Yo siempre le decía Dios te ama, busca de Él", dijo rompiendo en llanto la señora.
Y es que ellos no se explican lo que sucedió, pues al rato de no verlo decidieron buscarlo, fue entonces cuando uno de sus sobrinos lo divisó en el río. La única versión que manejan es que como estaba lloviendo, pudo resbalar, pero le queda a las autoridades determinar cómo se dio su muerte.
QUEDO SOLO
Daniel tenía un hijo de 12 años. Su abuela ahora se pregunta cómo lo ayudarán económicamente, si su padre no está.