Si Panamá pudiera cambiarse a punta de pinceladas, el pintor Radamés Pinzón sería el primero en hacerlo.

Su obra, que es denominada "La dispersión del chaflán" es una representación irreal de la ciudad con toques coloniales.

Pinzón, quien tiene en su haber diferentes premios, menciones y distinciones, aseguró que cada uno de sus cuadros muestran un universo surrealista de la ciudad, pero para hacerlo se documentó antes buscando la génesis de cada uno de los lugares del país.

"Lo que retrato en mi obra es un concepto contradictorio en donde no existe el tiempo", mencionó Pinzón.

Este pintor, quien nació en Penonomé, asegura que cuando vino a la capital hace muchos años se dio cuenta de que a pesar de que estamos rodeados de agua, la ciudad le daba la espalda al mar y las personas estaban más preocupadas por la Zona del Canal.

A través de la cultura, Radamés piensa que puede cambiarse la concepción de las personas y que encuentren su identidad, ya que eso es algo que nos hace falta y que tienen otros pueblos.