
Alimentarse bien es importante para el buen rendimiento de los niños, pero ante una actividad deportiva hay que seguir las recomendaciones de los expertos.
Alimentarse bien es importante para el buen rendimiento de los niños, pero ante una actividad deportiva hay que seguir las recomendaciones de los expertos.
Alimentarse bien es importante para el buen rendimiento de los niños, pero ante una actividad deportiva hay que seguir las recomendaciones de los expertos.
Alimentarse bien es importante para el buen rendimiento de los niños, pero ante una actividad deportiva hay que seguir las recomendaciones de los expertos.
Alimentarse bien es importante para el buen rendimiento de los niños, pero ante una actividad deportiva hay que seguir las recomendaciones de los expertos.
Alimentarse bien es importante para el buen rendimiento de los niños, pero ante una actividad deportiva hay que seguir las recomendaciones de los expertos.
Alimentarse bien es importante para el buen rendimiento de los niños, pero ante una actividad deportiva hay que seguir las recomendaciones de los expertos.
La alimentación en el deporte debe establecer el régimen dietético particular más conveniente para el deportista, según el deporte que practica y el momento deportivo (periodo fuera de competición, en preparación para una competición, durante la competición o después de la prueba) en el que se encuentra.
Lo ideal es mantener un buen estado nutricional y unas condiciones óptimas de reserva de energía y nutrientes que le permitan afrontar con garantías el momento de la competición.
En la alimentación del deportista no todos los alimentos tienen el mismo valor ni gozan del mismo prestigio a la hora de elaborar su alimentación.
Se puede decir que los alimentos energéticos son las estrellas de la dieta de los deportistas porque aportan al organismo hidratos de carbono y ácidos grasos que son utilizados por el organismo como fuente básica de energía.
Ejemplo de estos alimentos son el pan, las galletas, las papas, cereales, pasta, arroz, chocolate, frutos secos y aceites vegetales.
A estos les siguen en importancia los alimentos reguladores que son los ricos en fibra, minerales y vitaminas como las verduras, frutas, hortalizas y legumbres.
Por último, están los alimentos proteicos como carnes, pescados y huevos.
Consúmanlos en cantidades suficientes y adecuadas al deporte que se practica.
Dra. Ruth Sarmiento
Medicina General