Como pájaros en jaula. Así se sienten muchos niños de distintas comunidades.
En horas de la tarde, es frecuente ver cómo las calles citadinas sirven de cancha de juegos para practicar las conocidas "birrias". Esto representa un peligro.
Son pocas las canchas de juego que existen en lugares como San Felipe, Santa Ana, El Chorrillo y San Miguel, además de otros barrios populares.
Michael Cedeño, padre de familia, contó que es triste que no haya lugares donde los niños y jóvenes puedan practicar deportes, porque los sitios que hay son pocos.
Los niños manifestaron que, en ocasiones, tienen que ir a otros lugares para jugar o esperar turnos; es decir, las canchas que hay son "multiuso". Unos las utilizan para jugar fútbol y otros baloncesto, se van turnando. También existe el problema entre pandillas. Muchas veces no los dejan jugar en las canchas más cercanas, para evitar conflictos con los que viven en otras áreas.
El crecimiento de la población y los proyectos urbanísticos están dejando a un lado la importancia de las canchas de juego. Son pocos los que incluyen espacios reales para este fin. La realización de deportes en la niñez y adolescencia es vital en el crecimiento y desarrollo físico de las personas.
Ante esta situación, Michael se hace la pregunta: ¿Por qué razón las nuevas generaciones prefieren los videojuegos? ¿Será que no tienen otra opción?
Hay que tomar en cuenta que si los sitios desocupados los utilizan para construir edificios, ¿a dónde van a jugar los niños?
Según la Alcaldía capitalina, se tiene un proyecto para crear espacios deportivos, pero no se dieron detalles.
JUEGAN
Muchos se exponen a peligros cuando juegan en las calles. Éstas se convierten en canchas.
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