Intentan rescatarlos

Los tratan de ayudar. ”Mi mamá me da permiso y con lo que gano, me ayudo para mis gastos“, fue la respuesta de Marcos (nombre ficticio), un niño de siete años quien vende CD piratas en una esquina del supermercado Xtra en la 24 de Diciembre.

A simple vista se nota la necesidad que este menor de edad puede tener en casa, pues su ropa estaba sucia y sus zapatos rotos.

Al ser entrevistado por DIAaDIA, él solo sonreía, mientras su mirada de inocencia se perdía entre los transeúntes observando cómo el adulto que lo contrató para vender CD se alejaba para no tener problemas con las autoridades que llegaron al lugar.

Esta es la realidad que viven muchos niños en el sector este de Panamá, área que se ha convertido en los últimos meses en un lugar donde el trabajo infantil prolifera de manera rápida, sobre todo, en los centros comerciales.

Rosa Carrasco, jefa de la Dirección Contra el Trabajo Infantil y la Protección de la Persona del Ministerio de Trabajo y Desarrollo Laboral (Mitradel), aseguró que ellos han intensificado los operativos en los últimos años y eso ha logrado que las estadísticas de trabajo infantil bajen.

Explicó que cuando se dan estos casos, en primera instancia se le entrega una boleta al niño o adolescente para que se la lleve al padre de familia, si lo vuelven a ver en la calle, la Policía de Menores lo envía a un albergue de la Secretaría de Niñez y Adolescencia hasta que el padre o la madre lo retire.