
Esperan que recojan la basura.
EVERGTON LEMON
Esperan que recojan la basura.
EVERGTON LEMON
Esperan que recojan la basura.
EVERGTON LEMON
“Un día de estos me va a comer una rata. Esto es imposible, no podemos seguir así”.
Adriano Gonzalez
“Pasa un mes para que vengan a recoger la basura. Mientras tanto, los gallinazos allí”.
Sasha Gutierrez
“Los gusanos pasean de un lado a otro en los apartamentos y los olores son espantosos”.
Florencia Pauleth
Esperan que recojan la basura.
EVERGTON LEMON
“Un día de estos me va a comer una rata. Esto es imposible, no podemos seguir así”.
Adriano Gonzalez
“Pasa un mes para que vengan a recoger la basura. Mientras tanto, los gallinazos allí”.
Sasha Gutierrez
“Los gusanos pasean de un lado a otro en los apartamentos y los olores son espantosos”.
Florencia Pauleth
Esperan que recojan la basura.
EVERGTON LEMON
“Un día de estos me va a comer una rata. Esto es imposible, no podemos seguir así”.
Adriano Gonzalez
“Pasa un mes para que vengan a recoger la basura. Mientras tanto, los gallinazos allí”.
Sasha Gutierrez
“Los gusanos pasean de un lado a otro en los apartamentos y los olores son espantosos”.
Florencia Pauleth
Esperan que recojan la basura.
EVERGTON LEMON
“Un día de estos me va a comer una rata. Esto es imposible, no podemos seguir así”.
Adriano Gonzalez
“Pasa un mes para que vengan a recoger la basura. Mientras tanto, los gallinazos allí”.
Sasha Gutierrez
“Los gusanos pasean de un lado a otro en los apartamentos y los olores son espantosos”.
Florencia Pauleth
Esperan que recojan la basura.
EVERGTON LEMON
“Un día de estos me va a comer una rata. Esto es imposible, no podemos seguir así”.
Adriano Gonzalez
“Pasa un mes para que vengan a recoger la basura. Mientras tanto, los gallinazos allí”.
Sasha Gutierrez
“Los gusanos pasean de un lado a otro en los apartamentos y los olores son espantosos”.
Florencia Pauleth
Basural. Entre ratas, gallinazos y gusanos viven los residentes de Villa Gabriela, en Río Abajo.
Adriano González dice estar cansado de los malos olores y de ver correr de un lado a otro ratas del tamaño de zorras, que amenazan la tranquilidad de los moradores.
De igual manera, le asusta ver cómo los gallinazos revolotean por la basura y persiguen a los niños que viven cerca del basurero.
Los moradores se quejan de que el camión de basura pasa de mes en mes a recogerla, y que el tinaco que tienen es demasiado pequeño para la cantidad de desechos que acumulan en el lugar.