Con la llegada hoy del último grupo de reclusos a la Cárcel Pública de Santiago, se pondrá fin a los 85 años de historia como sitio de reclusión que tenía la Isla Penal de Coiba, la cual, por órdenes del Gobierno, dejará de ser el albergue para los reos más peligrosos de este país.

Y es que desde el pasado martes, la Dirección General del Sistema Penitenciario Nacional, conjuntamente con la Policía de Veraguas, iniciaron el traslado por mar de los últimos 27 internos que se encontraban purgando condenas en esta colonia penal, que funcionaba desde 1919 y que comprendía un total de 24 campamentos.