Guiados por un inspirado Stephon Marbury, Estados Unidos jugó ayer su mejor partido de los Juegos Olímpicos y se clasificó a las semifinales del básquetbol con una victoria 102 por 94 sobre España.

Marbury, quien había tenido una pésima olimpiada, encestó seis canastos de tres y anotó 31 puntos, un récord olímpico estadounidense, para encabezar un ataque que por primera vez en el torneo sobrepasó los 100 puntos.

El escolta de los Knicks de Nueva York superó el récord de 30 puntos que compartían Charles Barkley (1992 contra Brasil) y Adrian Dantley (1976 contra Yugoslavia). Los norteamericanos acertaron 12 canastos de tres y sacaron de pelea por medallas a España, que había llegado invicta a los cuartos de final y lucía como uno de los favoritos para subir al podio.