Otra estudiante del Instituto Técnico Profesional Jacobo Urriola de Portobelo sufre un desmayo, esta vez la joven se descompuso en medio de una reunión en el colegio en donde los padres de familia trataban de resolver el problema de los desmayos de más de 40 estudiantes y su posible pérdida del año escolar a causa de las faltas por el mal estado de salud en el que se encuentran.
Cuando se desmayó, la madre de la joven le colocó un crucifijo en el pecho y le daba a oler amoníaco.
En tanto, la ministra de educación, Lucy Molinar manifestó que esto puede ser una histeria colectiva y que el hecho que los padres de familia exponga a sus hijas de esa manera lo que hace es afectar y estigmatizar a las adolescentes.
Agregó que cree que los desmayos no tienen nada que ver con un efecto paranormal.