La diferencia entre los países pobres y los ricos no es la antigüedad. Lo demuestran casos como India y Egipto, que tienen miles de años de antigüedad y son pobres. En cambio, Australia y Nueva Zelanda, que tienen poco más de 150 años, hoy son países desarrollados y ricos.

La diferencia entre países pobres y ricos tampoco está en los recursos naturales con que cuentan, pues Japón tiene un territorio muy pequeño y es la segunda potencia económica mundial: En su pequeño territorio recibe materiales de todo el mundo y los exporta transformados a todo el mundo.

Suiza sin océano, tiene una de las flotas navieras más grandes del mundo; no tiene cacao, pero tiene el mejor chocolate del mundo; pastorea y cultiva sólo cuatro meses al año, ya que el resto es invierno, pero tiene los productos lácteos de mejor calidad de toda Europa.

Tampoco la raza ni la pobreza del hombre hacen la diferencia. ¿Qué es entonces lo que hace la diferencia? Es la actitud de las personas, que en los países ricos practican las siguientes reglas:

1. La Moral como principio básico.

2. El Orden y la Limpieza.

3. La Honradez.

4. La Puntualidad.

5. La Responsabilidad.

6. El Deseo de superación.

7. El Respeto a la ley y los reglamentos.

8. El Respeto por el derecho de los demás.

9. Su Amor al trabajo.

10. Su afán por el ahorro y la inversión.

¿Necesitamos más? ¡No!