Como un contrasentido, desde la provincia de Los Santos sale un brujo directamente al Wild Card de la Liga Americana. Del Festival de la Mejorana y de la Pollera, directo a una postemporada, en la que precisamente él es uno de los elementos importantes para su consecución.

Una vez Ramiro me confesó que el sobrenombre del "El Brujo" le vino de su hermano mayor, y que en realidad no es el brujo, sino "El Brujito", porque no sólo su hermano era el primero con el mote, sino que era mejor pelotero que él. Esa se las dejo para que los que los han visto jugar se entretengan en la comparación.

Fanático del típico, y mucho más alto de lo que uno se imagina al verlo en televisión, Ramiro ha regresado de una lesión que lo mantuvo apartado durante buena parte de la temporada, afilado como una máquina de afeitar de triple hojilla, 1.68 de efectividad con uno perdido sin ganados, permitiendo 15 hits en 19.1 ininngs, es una excelente actuación para uno de los seguros de los Medias Rojas, de él es el séptimo inning de cada partido, por delante de Timlin y Foulke.

"El Brujo de Azuero", al igual que aquel "Brujo de Borinquen", el inolvidable "Sonero Mayor", Ismael Rivera, debe dejar claro que "Todopoderoso es el Señor" y no los Yankees de Steinbrenner. Lo único malo de esta guerra de brujería y poder, es que el corazón de los panameños se divide entre Mariano Rivera y Ramiro Mendoza.

Pero debe ser orgullo de los "canaleros" el poder ver este súper final entre panameños.