La señora Albina (izquierda) trataba de mantener la calma. Raúl no tenía hijos. (Foto: Hermes González / EPASA)
Milagros Murillo F.
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El mal tiempo impedía que su cuerpo fuera sepultado. En una humilde ceremonia, familiares y conocidos de Raúl Olivares le dieron el último adiós en el templo Eben-Ezer, ubicado en la comunidad de Playa Chuzo, en el corregimiento de Tortí en Chepo.
Olivares, de 34 años, perdió la vida en un accidente ocurrido la tarde del lunes, mientras conducía el auto donde viajaba con su familia . Allí también murió su sobrino, el pequeño Luis Antonio Martínez, de 4 años.
Con una aparente tranquilidad, la señora Albina Barría, madre de Raúl y abuela de Luis, esperaba que iniciara la ceremonia para darle sepultura a su hijo. "Nos duele, porque eso ha sido una cosa muy grande", expresó. Ella y el resto de la familia estuvieron más de dos horas esperando que el agua de la quebrada del lugar bajara para poder cruzar. Tuvieron que aventurarse y pasar , aunque el agua les llegaba a la rodilla.
Albina dijo que esperan que hoy les entreguen el cuerpo del niño para sepultarlo. "Él me decía que quería ir a la escuela, yo le decía que se cuidara y él contestaba que sí, que pasaría lejos de los carros para que no lo mataran", decía.
En tanto, los padres de Luis, Clementina Sandoval y Luis Martínez, y sus hermanos Karen, de 10 años, y David de 5 meses se recuperan.