Hola, Moza: Le escribo para ver qué piensa. Tengo un novio al que quiero y me quiere, de verdad no tengo queja.

Él me dice que le encantan mis pies, es más, cuando estamos solitos me los besa desde el tobillo hasta el dedo gordo del pie. A él le fascina verme las uñas pintadas, sobre todo de esmalte rojo.

Otra cosa que le encanta es que me ponga anillos y tobilleras. Para ponerle un ejemplo, recientemente fue al extranjero y no me compró un suéter, sino sandalias y cosas para los pies.

En estos días, se me ocurrió ponerme unas sandalias, pero no me pinté las uñas y él se enojó, me pidió que no saliera nunca más a la calle así, que los pies son el orgullo de la mujer, ¿qué piensa?, ¿no cree que es exagerado?

ANETH

Estimada Aneth, los pies son uno de los fetiches más populares en los hombres.

En nuestro país hay el pensamiento de que es precisamente en esta área del cuerpo donde se comprueba si una mujer es realmente aseada.

Quizás su reacción fue un poco exagerada, pero comparado con otros hombres es un mal menor.

La próxima vez que te salga con eso, tómatelo con calma y dile que te pague el pedicura.

Dile también que te agrada que te admire los pies, pero que también te gustaría que se fije en tu cara, tu cuerpo, brazos, piernas, manos, y lo más importante, en tu corazón.

Hazle entender que no es bueno que el amor se centre en una característica física, sino que deben observarse otros detalles.

Porque imagínate si pierdes una uña, ¿te va a dejar de querer? Por suerte este problema tiene solución, así que no te estreses.