En nuestra sociedad, poco se habla de las fobias, se presta mayor atención a enfermedades terminales o a aquellas que pueden dejar secuelas y afectan a masas.
Existen distintos tipos de fobias, una de ellas es la claustrofobia que es el miedo irracional a los espacios cerrados (cuartos, ascensores, armarios, etc), pertenece al grupo de los trastornos de ansiedad.
La persona que presenta esto, trata de manejarse evitando las situaciones que le den ansiedad, en este caso espacios cerrados y se va limitando funcionalmente dejando de hacer cosas.
Excesiva ansiedad, miedo a un peligro inminente, sofocación, falta de aire y restricción de movimiento son algunas de las sensaciones que percibe el afectado, expresó la psiquiatra Neritza de Grimaldo.
¿QUE LO CAUSA?
Agregó que esta fobia se presenta por varias razones:
Transmisión genética.
Daños psicológicos: Temores inconscientes proyectados a una situación u objeto específico.
Condicionamiento: Conducta propia o aprendida.
TRANQUILIZARLOS
Si se encuentra con una persona que sufra un ataque de ansiedad de este tipo, es recomendable aplicar el principio de realidad, afirmándole al afectado que todo está bien y que no corre ningún peligro, esto lo relaja.
SE PUEDE TRATAR
Grimaldo expresó algunas de las maneras apropiadas para brindar ayuda a los que sufren de claustrofobia.
Terapias cognitivas conductuales: Se trabaja en los significados de la acción temida (de negativo a positivo), de esta manera, la ansiedad disminuye.
Medicación a base de antidepresivos si es el caso.
Tratamiento de desensibilización sistemático: Aproximación progresiva a la situación temida y ejercicios de relajación para manejar la ansiedad.
CERO RESTRICCIONES
Como se mencionó, la claustrofobia es una condición que puede llegar a limitar a quien la padezca, pues el afectado evita muchas situaciones. Es de suma importancia que de presentarla, se consulte a un médico.