Hizo historia en el boxeo panameño

El pleito del título mundial entre la panameña Chanttall Martínez y la dominicana Marilyn Hernández tuvo un toque especial.

La encargada de dirigir las acciones sobre el tinglado fue la guapa árbitro argentina Romina Arroyo, de 28 años de edad.

Desde hace un tiempo, Romina supo mezclar el aroma de mujer con el boxeo, un ámbito en el que las mujeres todavía son resistidas.

“Ser árbitro es una pasión para mí. Esta es mi quinta oportunidad para arbitrar un combate femenino por un título mundial este año. Sé que detrás mío vendrán muchas, y lo bueno es que estoy abriendo caminos en este deporte”, expresó Romina.

Además, sostuvo que fue un gusto inmenso dirigir un título mundial en Panamá, porque es un país donde la gente respira y disfruta el boxeo.

Inicios

Esta joven argentina, licenciada en Comunicación Social, manifestó que desde muy niña le gustó el boxeo, porque su padre la llevaba a las carteleras boxísticas.

“Yo comencé hace mucho tiempo, de chiquita, porque mi papá es un aficionado al boxeo y recuerdo que me llevaba al Salta Club y de ahí surgió mi pasión”, explicó.

Romina tuvo su primera oportunidad de pelea de título mundial el 26 de marzo de este año en su país, cuando la campeona Carolina Duer defendió su título supermosca de la Organización Mundial de Boxeo (OMB) ante Aziza Abuita, de Francia. Tres meses después, la OMB la designa de nuevo para dirigir el choque de la pelea minimosca OMB-AMB, entre la campeona argentina Yésica Boop y la mejicana Yesenia Martínez Castrejón. Fue la primera vez que un réferi mujer dirigió en el Luna Park.