El derrame de aguas negras y los olores fétidos en la escuela primaria de Boca de Parita, ocasionaron que los padres de familia, estudiantes y maestros suspendieran las clases ayer y hoy parcialmente.

Carmen Pinzón, presidenta de la Asociación de Padres de Familia de la escuela, manifestó que desde hace más de un mes el tanque séptico rebasó su capacidad y los alumnos están enfermando producto de los malos olores y la contaminación que hay en el patio del plantel educativo.

"El tanque séptico está a unos pasos de los salones de quinto y sexto grado y ya algunos de ellos han presentado cuadros de dolor de cabeza, náuseas, vómitos y nosotros no queremos que nuestros hijos sufran algo peor con esa contaminación", sostuvo Pinzón.

Un grupo de niños de quinto y sexto grado dijeron que los maestros los enviaron a sus casas porque no aguantaban los fuertes hedores, "cuando halamos la cadena, las heces se devuelven".

Pero la contaminación no sólo afecta a la escuela. La moradora Celinia Sandoval, vecina de este centro educativo, manifestó que desde hace años vienen sufriendo con las aguas servidas de la escuela. "Las aguas corren frente a nuestras residencias y los malos olores no los soportamos, eso se da de día y de noche".

Los padres de familia, maestros y alumnos, dijeron que no asistirán a clases hoy hasta que se subsane la situación.

Se trató de contactar a la directora de Educación en Herrera, Judith Valdés, pero se encontraba en misión oficial en la ciudad capital y tampoco respondió la llamada al celular.