Como nueva. Mientras los ingenieros terminaban ayer el proceso de limpieza en seco de una de las cámaras de la esclusa de Pedro Miguel, en el Pacífico, en la otra cámara nada había cambiado, el cruce de grandes cargueros continuaba sin detenerse.
La grandeza del Canal de Panamá, sólo se puede observar cuando se está en sus entrañas, y estas esclusas son un ejemplo palpable de ello.
MANTENIMIENTO
Los trabajos de mantenimiento de la esclusa, que se iniciaron el pasado 5 de septiembre y culminaron ayer, forman parte de un programa que incluye todas las esclusas y estructuras del Canal. El objetivo es mantener un servicio rentable y competitivo para enfrentar la creciente demanda de buques por la vía interoceánica.
Carlos A. de Icaza, ingeniero de mantenimiento de las esclusas de Pedro Miguel, explicó que las labores comprendieron la remoción de cuatro compuertas que fueron trasladadas a los astilleros en Colón para su correspondiente mantenimiento. Además se hicieron inspecciones internas y trabajos rutinarios en las válvulas de la esclusa.
En esta fase que duró seis días, se revisaron dos compuertas y se utilizaron B/. 7 millones del presupuesto anual de mantenimiento, que es de B/.200 millones, aproximadamente.
Cada 20 años se revisan las compuertas de los dos juegos de esclusas del Canal. Anualmente por el Canal transitan alrededor de 15,000 barcos.
LOS TRABAJOS
Se efectuaron ininterrumpidamente durante seis días.
|