A Hulk Hogan ni ir a la playa lo salva de la mala suerte.

Su mujer lo quemó, lo dejó y le quitó un realero. Su hijo fue sentenciado a 8 meses de cárcel por conducir ebrio y ahí no terminan sus descalabros...

Hulk sufrió una contusión mientras recogía conchitas en la playa; es probable que el estar agachado haya sido la causa de la lesión.

El famoso luchador de 57 años, sufrió el daño en la columna vertebral en una zona en la que ha tenido varias operaciones. Por ello, los médicos del Hospital Morton de Clearwater (Florida), no descartan una parálisis debido a la seriedad de la contusión.

A pesar de los fuertes espasmos en la espalda y los dolores de cabeza, Hogan informa desde su cama -día a día- en la red social Twitter sobre su estado de salud, y hasta graba videos y los cuelga para que sus miles de seguidores puedan ver de cerca su evolución. ¡Ojalá no pase a mayores!