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¡Pura dedicación!
Anayasi Montaño. (Fotos: Carlos Ortega / EPASA)

Kathyria Caicedo | DIAaDIA

Ella nunca pensó que su creatividad de niña le serviría para emprender un negocio.

Ahora, luego de criar a sus hijos y a los nietos, Anayasi Montaño decidió invertir su tiempo en la artesanía. Ella hace collares, aretes, tembleques. Eso sólo por nombrar algunas cosas, porque el talento de Anayansi es infinito.

SU ESPECIALIDAD

Uno de los trabajos más peculiares que realiza esta mujer son las muñecas típicas. Pero esta faceta de Anayansi tiene una historia muy curiosa. Resulta que este arte de vestir a las muñecas lo aprendió de niña.

Cuenta que su mamá no tenía mucho dinero, por lo que se iban a la bajada de "Salsipuedes" y compraban las muñecas. Era ella quien se encagaba de hacerles todos los vestidos, las carteras, los sombreros. Sus amiguitas le preguntaban "cómo hacía para hacer los vestidos". Ella sólo les contestaba que no tenía dinero para barbies, ni para sus vestidos. Ahora le saca provecho a ese talento.

JUNTO A SU ESPOSO

Anayansi tiene su local en el cual no sólo vende sus confecciones, sino también las pinturas de su esposo. Así es, juntos han decidido poner manos a las obras y se dedican tiempo completo a sus ventas, desde hace tres años. Es más, sólo el pasado fin de semana, Anayansi tenía su puesto instalado en el Mercadito de Pulgas, que realizan el primer domingo de cada mes, en la Plaza Catedral. "Nunca faltan", confesó.

Entre las otras aplicaciones que tiene Anayansi están los velos de novia, las polleritas para niñas y más.

JUNTOS

El arte de Anayansi y su esposo se puede encontrar en el local 22 del Centro de Artesanías de Panamá Viejo.





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