Una travesura le provocó la muerte. En el hogar de Dayra y Guillermo hoy se respira dolor, pues su angelito de tres años, que los hacia reír y que era el orgullo de todos, se les fue prematuramente, dejando un vacío eterno en sus corazones.

Según Angélica, bisabuela del niño, el domingo pasado, después de llegar del supermercado con su padre, Michael Emile González Bonilla, se quedó en el carro y se puso a jugar. El auto fue estacionado por su padre en el patio de su casa, ubicada en Las Mañanitas de Tocumen.

Como todo niño que le gusta experimentar, Michael no se escapó de la curiosidad, por lo que se puso a tocar todo dentro del auto, lo que provocó que éste se incendiara y por su edad no pudo escapar a tiempo de aquel infierno.

Todo sucedió en segundos. Cuando sus padres se percataron del hecho, era tarde, Michael ya estaba gravemente quemado, dijo Angélica

Rápidamente fue traslado, por ellos, a la policlínica de la Caja de Seguro Social, JJ. Vallarino en Juan Díaz, a eso de las 6: 00p.m., donde recibió los primeros auxilios. Horas más tarde fue remitido al hospital del Niño, en donde falleció a la medianoche del lunes.

QUEMADURAS

Según los galenos que atendieron el caso, el niño sufrió quemaduras de segundo y tercer grado en el 50% de su cuerpo, al igual que en su interior por inhalación de humo, lo que no le permitió sobrevivir.

Por otro lado, el auto fue retirado del lugar por la Policía, para la investigación que lleve a conocer qué ocasionó el incendio que terminó con la vida de este angelito.

INQUIETO

Michael era el hijo más chico de tres hermanos, era muy alegre y vivaz. Hoy se nota un gran vacío en su hogar.