Ingeniosos vendedores

La competencia está dura. En Panamá, es común observar puestos de ventas ambulantes, pero más curioso es ver cómo sus dueños se las ingenian para conseguir algo más de dinero y ganar la acalorada batalla de ser el mejor vendedor.

Una de ellas es Ana María, quien prende su propio fogón moderno en la calles y mantiene sus pixbaes calientes. Ella vio que la venta del producto ha proliferado y tenía que buscar algo que le diera más clientes, y qué mejor forma que mantenerlos calientitos. Ahora, vende más que otras personas y hasta le han copiado su idea, ella tiene el puesto ubicado en la entrada de la 5 de Mayo.

¿Cómo lo logró?

Ella compró una vasija de aluminio, le hizo un agujero con una pequeña manguera que aguanta calor y le instaló el gas que hace hervir el agua del fondo de la olla y permite que el vapor fluya .

Otros, optan por andar en bicicletas y llegar a diversos lugares en un mismo día; otros hacen ofertas, que hasta a ellos mismos les da pesar; con tal de ganar unos centavos más.

El café

Con leche, expreso o con azúcar, así es vendido el café de forma callejera, pues un grupo de hombres se las ingenió para conseguir un carrito de súper y colocar algunos termos llenos de esta bebida, que es vendida en vasitos.

Lo mejor es que el precio es asequible, pues lo que le cuesta en un restaurante $0.60 o más, ellos lo dejan hasta en $0.40.

Al final, el que gana es el consumidor, aseguraron los comerciantes, pues por él se las ingenian con tal de que se lleve algo bueno y pague bien.