Perdieron casi todo. Osiris Foote estaba en el hospital con su pequeña hija que tenía 41 º de fiebre, por lo que desconocía lo que en su casa estaba sucediendo en horas de la madrugada del 8 de septiembre. Sin embargo, su esposo Aquiles Ortega y sus demás familiares fueron testigos de cómo poco a poco un fuego consumía su residencia y acababa con la mayoría de sus muebles.

Aquiles resultó quemado en el brazo izquierdo cuando intentaba salir de la habitación, ya que la puerta estaba encendida.

Cuando Osiris regresó a su casa, en horas de la mañana, se dio cuenta de que tenía que volver a empezar de nuevo, porque había perdido más de 4 mil balboas en muebles. Las sillas, su ropa, su juego sala y comedor, todo se desvaneció. Lo único que queda son las cenizas como recuerdo.

Desde que se registró el incendio no han podido habitar la residencia, por la contaminación de humo que afecta tanto a los niños como a los adultos.

La familia entera está preocupada, piden a las autoridades que les brinden una ayuda para poder comenzar de nuevo.

HORA

A las 2: 00 de la madruga, se registró el incendio mientras todos dormían.