El Municipio de Antón ordenó derribar siete postes de luz que existían en el campo deportivo y que eran el hogar de miles de abejas africanizadas que atacaban a los residentes del área.
Hace dos semanas, más de cinco familias fueron afectadas por las abejas africanizadas, que durante 10 años habían permanecido en los postes de luz del estadio, pero éstos ya no eran utilizados. La comunidad pedía al municipio se derribaran los postes por seguridad de la población.
A pesar de los esfuerzos, las abejas africanizadas no se retiraban del área y no se podían eliminar porque los postes eran muy altos, causándole molestias a la población que exigía los derribaran para evitar más ataques de abejas.