Han pasado dos días desde la última rasurada, y de pronto aparecen en el área varios granos que dejan un sin sabor a las damas, que atónitas ven como se afecta la estética de la zona externa vaginal.
El ginecólogo, Carlos Díaz, manifestó que las "las navajas de afeitar" no provocan bacterias, éstas vienen por las pocas medidas de asepsia correspondientes al momento de hacer el rasurado.
Como consecuencia a la mala higiene se produce la Foliculitis, que es una infección propia de la misma raíz del vello que al ser halado provoca que la bacteria cercana pueda entrar al folículo piloso.
Antes de la rasurada se debe colocar un jabón desinfectante, pero siempre y cuando sea untado en la parte externa y no se introduzca dentro de la vagina.