El Real Madrid se entrenó ayer a puerta cerrada durante algo más de una hora en el estadio Santiago Bernabéu, tal y como dispuso Fabio Capello tras la derrota del miércoles ante el Olympique de Lyon francés, y con el objetivo de preparar el partido de mañana ante la Real Sociedad.
Capello prepara de esta manera el asalto a la tercera jornada liguera tras el tropiezo de Lyon y la variable imagen mostrada en el toreo local, en el que suma un empate sin goles en casa ante el Villarreal y una victoria en Levante por 1-4.
El grupo estuvo dividido en dos grupos durante el entrenamiento. Por una parte, los titulares ante el Lyon se pusieron a las órdenes de Máximo Neri para realizar series de velocidad y de cambios de ritmo.
|