Hay personas que tienen un inigualable don de gente, ese es el caso de Dalia Maclao. Ella es una joven residente de Curundú, pero tiene un empuje como nadie.

Dalia es una mujer súper preparada, les digo esto, porque cada vez que hay un curso de electricidad, soldadura, informática y otras, ella los toma. Igualmente, sintió la necesidad de convertirse en una voluntaria del programa de alfabetización "Muévete por Panamá".

Tal fue la suerte de Dalia, que la oportunidad le llegó, se puede decir que a la puerta de su casa. Dalia estaba en la Escuela Fe y Alegría, lugar habitual donde se la puede encontrar, y la profesora Dalys, le preguntó si deseaba ser voluntaria y casi que brincando en un pie, aceptó.

EL CAMBIO POSITIVO

Espero a que le dieran la fecha de inicio y ella misma se puso a captar a sus estudiantes, en su mayoría indígenas. "Si quieres aprender, yo te voy a enseñar", era una de las tantas frases para convencer a sus estudiantes. Al final lo logró, un grupo de 12 personas alfabetizadas.

PERO NO FUE FACIL

Dalia es un líder en Curundú, ella está en todo. Ayuda a sus vecinos, da clases en la iglesia, era voluntaria de alfabetización y tras eso tenía que atender su casa.

"A veces, yo decía cómo no ir a dar clases, porque estaba muy cansada, pero me decía, yo cogí esta responsabilidad para que ellos aprendan", así se alentaba Dalia, para poder seguir a pesar del cansancio.

GRADUANDOS

Los 12 estudiantes de Dalia formarán parte de la 2da promoción de alfabetizados de Panamá Centro.