Comienza bien. El objetivo de todo beisbolista al llegar a las Grandes Ligas es hacer bien su trabajo para mantenerse y convertirse en un pelotero regular, y eso fue lo que comenzó a demostrar ayer el pelotero panameño Luis Durango, después de conectar tres imparables en la victoria de su novena, los Padres de San Diego.

Durango no olvidará ese primer imparable que conectó ayer, en apenas su segunda participación en un juego de las Grandes Ligas, en el segundo episodio del encuentro ante los Diamondbacks de Arizona.

Tampoco olvidará ese décimo episodio en el cual anotó la carrera que le dio la victoria de los Padres 6 por 5, corriendo desde la segunda base, superando el disparo de Justin Upton.

"Fue algo grandioso para toda la familia, y mi mamá estaba contenta cuando vio a mi hermano en el primer turno al bate en las Grandes Ligas -el martes-. Todos estamos felices, y luego de su actuación ayer estábamos ansiosos por comunicarnos con él en Estados Unidos", dijo su hermano Alexis Durango a DIAaDIA.

Durango, en su primer encuentro ayer como titular en las Mayores, abrió el décimo episodio con su tercer sencillo en el partido, el cual al final y gracias a su velocidad le dio la victoria a su novena, convirtiéndose el panameño en el héroe de la noche.

Durango fue uno de los mejores bateadores de los Padres de San Diego al conectar de 4-3, con dos carreras anotadas.

N.° 50

Durango se convirtió oficialmente el martes en el panameño N°. 50 que juega en las Grandes Ligas.