¿Conoce usted lo que es un serpentario? ¿No? Pues debe visitar El Valle de Antón, donde hace más de un año, en un pequeño local, se exhiben diferentes especies de serpientes, ya sean venenosas y no venenosas, cuidadas por un biólogo con más de 10 años trabajando con estos ofidios.

Mario Urriola es un biólogo para quien estas víboras son muy especiales y hay que conocerlas para cambiar la mentalidad de mucha gente que piensa que ellas son dañinas y que solo sirven para atacar.

Cuenta Mario que hace más de un año surgió la idea de crear un pequeño Serpentario, y fue apoyada por su esposa María Elena, sus padres y su hija Gabriel, de dos años y medio, que ya tiene muchos conocimientos acerca de la vida de las serpientes y otras especies de animales que hay que conservar.