Hola Moza, mi nombre es Olga y te escribo para desahogarme, pues siento que tengo un nudo en la garganta y no puedo arrancármelo.

Sucede que hace días, al salir de mi trabajo, quise darle una sorpresa a mi pareja y creo que fue el error más grande que he cometido, ya que cuando llegué allí, mi novio sí estaba, pero no solo.

Moza, estoy destruida, porque cuando pensé acercarme para decirle que estaba allí, una chica se bajó de un taxi, le dio un fuerte abrazo y un beso en la boca por varios minutos.

Lo más triste para mí fue que él estaba tan feliz, que la miraba fijamente a los ojos. En ese momento, sentí que se me caía el mundo y casi me desmayo, pero un chico me atrapó.

En ese instante, él miró por los gritos de una señora que me vio mal y descubrió que era yo, quedó paralizado y me dijo: "qué haces aquí". No quise interrogarlo y le dije que cómo podía hacerme algo así, si yo lo amo más que a mi vida.

La chica sólo miraba sorprendida y me preguntó quién era yo, pues ella era su novia oficial desde hace más de seis meses. Le contesté que llevábamos dos años juntos y ella, al igual que yo, empezó a llorar. Él ni siquiera explicó nada y me pidió que me fuera, pues se fue con esa chica y no le importó lo que yo sentí en ese momento.

Al día siguiente, tuvo el cinismo de llamarme para que conversáramos y quería darme una explicación, pero no quise aceptarla; han pasado dos semanas y siento que me voy a morir. ¡Ayúdame!

ARRANCALO DE TU CORAZON

Olga, por lo que me cuentas, ese hombre no sirve para nada y creo que no merece ni una lágrima tuya. Por eso, te aconsejo que si le aceptas alguna explicación no te dejes engatusar.

Es bueno que te explique por qué lo hizo o trate de inventar una excusa, pero lo que no es aceptable es que después de tanto, tú le permitas que vuelva a jugar contigo.

Recuerda que eres tú quien debe darte tu valor, nadie lo hará por ti. Además, piensa que si eso sucedió fue por algo, y tal vez Dios tiene destinado para ti alguien que te valore, te respete y te quiera de verdad. ¡Suerte!