Firmaron un pacto de no agresión. Atlético Madrid y Barcelona se repartieron puntos e ilusiones, en un partido que dejó a ambos satisfechos; al conjunto de César Ferrando, porque sigue invicto tras superar el primer gran escollo de la temporada, y al de Frank Rijkaard, porque confirmó en Madrid que puede aspirar a grandes empresas.

Los jugadores del Barcelona lamentaron las ocasiones falladas ante el Atlético de Madrid, pero se mostraron satisfechos con la imagen dada y con el punto conseguido en el partido de la tercera jornada de Liga (1-1).

Fernando Torres, delantero del Atlético, dijo que el empate fue "justo", ya que a su juicio, los madrileños no "perdieron" en ningún momento "la cara" al partido.