
Son varias las inconformidades.
Son varias las inconformidades.
Tras intensa lucha para ser escuchados, los moradores de las comunidad afectadas en Herrera y el Ministerio de Obras Públicas acordaron acoger todas las inquietudes que afectan a los residentes por la construcción de la ampliación en la vía Divisa – Chitré, a la altura del distrito de Santa María. “Queremos que nos eliminen las aceras asesinas”, expuso Ana Tello, vocera de la comunidad. Después de una intensa reunión que se llevó a cabo en el Salón Parroquial en Santa María, Eliécer Broce, inspector nacional de obras del Ministerio de Obras (MOP), dijo que había sido enviado expresamente por el ministro de la cartera, Federico Guardia, para escuchar todas las inquietudes de los residentes y llevarlas a su despacho. Uno a uno, los moradores expusieron que no están de acuerdo con las feas y mal hechas aceras a lo largo de la vía principal, por lo que exigen que sean eliminadas y se deje la carretera con el mismo nivel que tenía antes. A esto Broce señaló que la vía se podría quedar con la acera un poco más extendida, pero a nivel de la calle.
Los santamarianos también esperan que permanezca la vista del pueblo que ellos tenían antes de la construcción de la vía principal.