Es el clímax del Festival de la Mejorana. La tarde de ayer, tambores, acordeones, cajas y las tonadas tradicionales de los tamboritos no se dejaron esperar para tomarse las calles de Guararé, cuando miles de panameños se dieron cita en el Desfile de Carretas del Festival Nacional de la Mejorana.

Sara Bello, de la Calle Abajo, y Renata Díaz, de La Calle Arriba, no podían faltar a la cita, al igual que Joseline Ornano, Reina Nacional de la Pollera, y Zue Ellen Vargas y Elsi Enid Broce, reinas del festival en los años 2003 y 2004, respectivamente.

Ahhh, se me olvidaba, hasta Los plumas Negras dejaron el luto y presentaron una carreta que engalanó con una pollera su cantalante, Madeline Pineda.

Cientos de empolleradas, diablicos de todas partes, la danza de los Cucúas de Coclé, los infaltables congos de Colón, el torito guapo de Antón, e incluso, los Ngöbe buglé, estuvieron allí dándole matiz a esta muestra anual de la cultura criolla panameña. Instituciones públicas como la Lotería Nacional, el Ministerio de Desarrollo Agropecuario y el IPAT fueron parte del espectáculo de calle, que se extendió desde las 2: 00 hasta pasada las 4 de la tarde, y que convocó a la mayor cantidad de visitantes durante todo el desarrollo de esta versión del Festival. ¡Chuzo, era impresionante!

EL CUENTO DE MIRTA

Esta parte se las dejé para el final, porque realmente "Hecho en Panamá" se robó el show, al presentar la estampa de una mujer que lleva a su marido rumbo al cementerio, a la vieja usanza, en donde Mirta, la desconsolada esposa, a llanto claro y acompañada de la actriz santeña Isolda Saavedra, pedían el consuelo de los presentes, mientras Kendal lloraba igual, pero de la borrachera, haciendo el personaje del clásico impertinente que nunca falta en estos eventos. ¡Hay que reconocer que tienen madera de actores! ¡Jo!

El cierre del desfile estuvo a cargo de la princesa Jeanmarie Vidal y la reina Leyris Díaz, quien presentó un diseño inspirado en los elementos que dan vida a los juegos de toro y que fue creado por el guarareño Eliodoro Sandoval. ¡Qué festival!