
Hay variedad de productos a un económico precio.
Hay variedad de productos a un económico precio.
Hay variedad de productos a un económico precio.
Un trato de primera es lo que reciben sus clientes.
Este local abre de lunes a domingo, de 5:30 a.m a 6:00 p.m.
Vende periódicos hace 10 años.
Cecilia se levanta muy temprano para estar a tiempo en su trabajo.Foto: EMILIA ZEBALLOS
Hay variedad de productos a un económico precio.
Un trato de primera es lo que reciben sus clientes.
Este local abre de lunes a domingo, de 5:30 a.m a 6:00 p.m.
Vende periódicos hace 10 años.
Cecilia se levanta muy temprano para estar a tiempo en su trabajo.Foto: EMILIA ZEBALLOS
Hay variedad de productos a un económico precio.
Un trato de primera es lo que reciben sus clientes.
Este local abre de lunes a domingo, de 5:30 a.m a 6:00 p.m.
Vende periódicos hace 10 años.
Cecilia se levanta muy temprano para estar a tiempo en su trabajo.Foto: EMILIA ZEBALLOS
Hay variedad de productos a un económico precio.
Un trato de primera es lo que reciben sus clientes.
Este local abre de lunes a domingo, de 5:30 a.m a 6:00 p.m.
Vende periódicos hace 10 años.
Cecilia se levanta muy temprano para estar a tiempo en su trabajo.Foto: EMILIA ZEBALLOS
Hay variedad de productos a un económico precio.
Un trato de primera es lo que reciben sus clientes.
Este local abre de lunes a domingo, de 5:30 a.m a 6:00 p.m.
Vende periódicos hace 10 años.
Cecilia se levanta muy temprano para estar a tiempo en su trabajo.Foto: EMILIA ZEBALLOS
Su niñez no fue fácil, debido a que en su pueblo Santa Rita, en Antón, tenía muchas necesidades y buscaba sus propios alimentos a su corta edad para sobrevivir a su cruda realidad.
“A los nueve años me trajo mi mamá para la capital con planes de trabajar en casa de familia, pero la señora Silvia de Gómez me crió y me educó”, dijo Cecilia.
Lloró casi 20 años por lo que su madre le había hecho, pero hoy en día comprende que fue lo mejor para su futuro, ya que está graduada de costurera y tiene su propio local llamado El Árbol. Además, vende periódicos y cría pollos.
El local El Árbol está ubicado al frente de la Caja de Seguro Social de la Transístmica y tiene 15 años. Ha pasado de vender pastillas a dulces, guineo, soda, jugos, entre otras variedades.
Ella vende periódico hace 10 años en su local. Es como un sueño hecho realidad tener este negocio que une a mi familia y que sea tan frecuentado por los clientes, ya que a ellos nos debemos y lo atendemos como se lo merecen”, recalcó
Antes de este pequeño puesto, trabajó 36 años en una fábrica de costura de ropa y con ese dinero educó, junto a su esposo, a sus 3 hijos, que son todos unos profesionales. Su hijo menor es discapacitado y lo tiene asegurado con la plata de su jubilación.
Por lo peligroso del lugar donde tiene su quiosco - roban mucho de día o de noche - desea un área más segura y amplia donde pueda vender sus productos sin ningún temor.