HISTORIA
¿Sería igual?

Redacción | DIAaDIA

Una niña miraba a su padre una y otra vez. Mientras más lo miraba, más se sentía orgullosa de él. Era tan alto, tan inteligente, tan amante de su hija y amoroso con su esposa, que ella sólo deseaba ser algún día tan digna como él.

El padre ignoraba que era observado con tanta atención por su hija. El desayunaba, mientras hojeaba su periódico para luego dirigirse a su trabajo y, de paso, dejar a su querida niña en el colegio y a su esposa en su trabajo. Siempre fue muy responsable. Su familia era lo primero.

Ya en su despacho, a media mañana, recibe una llamada de la escuela de su hija. Había sufrido una caída que la dejó inconsciente, tirada en medio de la escalera.

Su corazón dio un vuelco. ¡No podía ser... apenas acaba de verla tan linda, tan llena de vida, tan sonriente mientras corría con su lonchera y su mochila rumbo al salón!

Llamó a su esposa y la recogió frente al edificio donde laboraba. Juntos emprendieron el angustioso viaje hacia el hospital adonde habían llevado a su nena. Por su mente pasaron aquellos momentos en que nació, cuando caminó por primera vez, cuando dijo papá, cuando besaba a su madre y se "maquillaba" como ella.

Cuando llegaron, su niña no era más que una pálida silueta acostada en una camilla, en un cuarto solitario. El y su mujer se acercaron, y fue entonces cuando sucedió: ¡Como si sólo estuviera esperándolos, la niña abrió sus ojos para alcanzar a decir´: "¡cómo me hubiera gustado ser como tú, papi! Cuídalo mami, como él siempre me cuidó a mí!". Y se despidió sonriendo.

¿Pensaría lo mismo tu hija de ti? ¿Le has dado suficiente amor, o lo has dejado para "después", sin saber si lo habrá?

Ciudad de Panamá 
Copyright © 1995-2006 DIAaDIA-EPASA. Todos los Derechos Reservados