Las niñas que escapan de sus hogares son presas fáciles para los explotadores sexuales. Así lo explica la sierva Aracelys Argüelles, quien a los nueve años, debido a las condiciones económicas de su familia, optó por prostituirse. Hace poco, dos niñas se fueron de su casa en Chivo Chivo por 10 días.

"Uno a los nueve años se deja llevar de la mano de una persona, tú estás confiada. No sé qué habrá pasado con esas niñas, pero hay que rescatarlas. Yo no tuve la suerte de que me rescataran, de que alguien me hablara", relató. Ella pensó que esa era la solución al problema de su casa. Narró que se iba para Santiago, Chiriquí y estuvo por más de un año viviendo en Colón sin decirle a su madre dónde estaba.

Definió que prostituirse no es sólo pararse en una calle, es también subirse a un carro o aceptar ir a un bar con un hombre... y ganarse un dinero.

"Estuve acostumbrada a la vida fácil. Tuve plata, casa, dos carros, pero me sentía asqueada de tanta cochinada que estaba viviendo", expresó con seguridad, pues se siente liberada.

A los 45 años, Argüelles hizo un alto: pensó en sus hijos y Dios tocó su vida. Hoy trabaja con cientos de jóvenes de bandas de todos los barrios populares de la capital y los defiende a capa y espada, pues "esa es la gente que todo el mundo menosprecia y que nadie quiere". Allí, ella hace su discipulado. "Mi satisfacción es que ya no vemos tantos jóvenes muertos, pues estamos con ellos sembrando el temor de Dios. Diciéndoles alto a la violencia y que hay una vida mejor que los espera a ellos, pues si Dios lo hizo conmigo, también los puede levantar a ellos", enfatizó.

EVADIDAS

DIAaDIA se trasladó a la comunidad de Lucha Franco Sur en Chivo Chivo para conocer por qué decidieron escapar las niñas, de 12 y 14 años.

LOS MOTIVOS

Magdalena, de 12 años, asegura que decidió irse de casa por las constantes peleas que mantenía con su hermano, de 24 años. "Él se la pasaba regañándome y me ponía a lavarle", dijo. Ahora, el joven tiene que abandonar el hogar y ella asegura que no se irá más, pues si algo le molesta o incomoda hablará con sus padres para resolverlo.

Asegura que todo el tiempo se quedaron en El Chorrillo en casa de una señora llamada Guadalupe, quien es la mamá de una amiga de ambas, que tiene 14 años. "Ella nos trataba bien, a veces nos llevaba a comer". Sin embargo, las autoridades no han dado con el paradero de esta mujer.

Agregó que quería regresar a casa, pero tenía miedo de que sus padres tomaran represalias. A pesar de ello, la otra menor quería viajar hasta Chimán con la hija de Guadalupe.

Pero, una menor que reside en Lucha Franco, manifestó que sus vecinas no estuvieron en El Chorrillo, sino en otro lugar con un amigo de ambas.

SON RESCATABLES

Juan Carlos Rivas, psicólogo de la Dirección de Niñez del Ministerio de Desarrollo Social (MIDES), fue enfático que en casos como éste es importante que los padres mantengan una buena comunicación y confianza con sus hijos. Afirmó que lo recomendable no es tomar represalias, sino mejorar las relaciones familiares.

PROTECCION PARA LA NIñEZ

Por casos como el de Magdalena y Mara, es que el MIDES implementa un sistema de protección integral para la niñez en Panamá y América Latina, en el que se aborda la Explotación Sexual Comercial y los derechos de los menores de edad; por ejemplo, los castigos a menores en áreas indígenas.

LOGROS

Argüelles preside la Fundación Unidos por La Paz y ha logrado la armonía entre bandas rivales. Esa es su gran misión.