Luis no puede dejar de fumar. Ha pensado en internarse en un centro especializado para fumadores. (FOTOS: AGUSTÍN HERRERA / EPASA)
Viola Guevara Gallimore
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Pierde la batalla. En su cuerpo ya se notan los estragos del cigarrillo y con apenas 44 años de edad, Luis Horna cuenta el calvario que vive a causa del tabaco.
Él fue operado de cáncer de pulmón por el tabaquismo, vicio que inició a los 13 años, pero lo que más le preocupa en estos momentos no son los padecimientos que sufre, sino que no puede dejar de hacerlo.
Luis se fumaba diariamente más de una cajeta de cigarros, pues creció en medio de un círculo de fumadores, ya que sus padres también lo hacían. Su abuelo murió de cáncer de pulmón, lo que implica otro factor de riesgo.
Horna vivía como fumador activo sin parar, y confesó que nunca pensó que ese vicio, que tanto le gusta, fuera el detonante que está acabando poco a poco con su vida.
Por un año completo estuvo bajo los efectos de la quimioterapia y radioterapia.
SUFRIMIENTO FAMILIAR
Juan Carlos, un familiar Luis, narró que fueron momentos difíciles y que un pariente de una persona con cáncer sufre igual, porque "ves todos los tratamientos".
Luis fue operado un año después de los tratamientos y allí perdió el 30% de su pulmón izquierdo; sin embargo, su historia no acabó, porque llegaron las secuelas.
Meses más tarde un derrame cerebral le dejó toda la parte derecha del cuerpo sin poder mover y hasta sin hablar. Los doctores le explicaron que la situación se da porque los tumores que crecen en los pulmones tocan la médula ósea, por lo que afecta la circulación.
DOBLEMENTE ENFERMO
Luis tiene una adicción que ha sido peor que el cáncer y el derrame que padeció, pero no lo puede controlar.
Aunque lo hace con menos frecuencia, fuma diariamente.
Él confesó que está consciente de que puede volver a padecer cáncer. "El que está allá arriba es el que manda", manifestó resignado.
QUIERE, PERO NO PUEDE
Un mal que toca a muchos. Pablo Álvarez, de 25 años, (nombre ficticio para cuidar su identidad) fuma desde hace nueve años. Recordó que inició porque mucha gente lo hacía y, después, para relajarse de situaciones de estrés. En el caso de Álvarez, quien es estudiante universitario, el ver a sus amigos fumando le impide dejar de hacerlo. Sin embargo, expresó que ya empezó a notar los efectos de este mal, pues "antes hacía ejercicios y ahora no puedo, me canso rápido".
REALIDAD
Según el radioncólogo Keith Britton, en el 2008 ingresaron 97 pacientes con cáncer de pulmón al Instituto Oncológico Nacional (ION) y en lo que va del 2009 van 47. El rango de edad en su mayoría son mayores de 45 años.
Destacó que aunque es el séptimo cáncer que se registra en incidencias, en el ION es la segunda causa de muerte, según estadísticas del 2008, debido a que "las personas llegan tarde".
MARCA A LA MUJER
El director médico del centro de salud de San Felipe, Iván Díaz, explicó que la nicotina (ingrediente central del cigarrillo), es más adictivo que la heroína y cocaína. El galeno aclaró que ninguna sustancia que intoxique te relaja, por lo que esa "excusa" de los fumadores de que el tabaco calma es algo psicológico.
Explicó que el cigarrillo está compuesto por cadmio, utilizado en las baterías de carro, arsénico, cianuro de hidrógeno y otras sustancias que destruyen el cuerpo.
Destacó que, en el caso de la mujer, ésta posee una célula llamada Langerhans que protege el cuello uterino y que al ingerir nicotina, la destruye, lo que la expone a la infertilidad y cánceres de cuello uterino.