Ya tienen un bello lugar para descansar. Con el sudor de sus frentes y con la fuerza de sus manos, 30 reclusas reconstruyeron el parque del Centro Femenino de Rehabilitación. Según las internas, para adornarlo muchas se inspiraron en sus hijos y otras sólo se dedicaron a darle vida a este sitio, con el fin de alegrar la vida en ese lugar tan oscuro. El trabajo lo realizaron en 15 días y consistió en limpieza, pintura, colocación de baldosas y aceras, entre otros.
Antes de realizar la obra, las internas del centro participaron en una capacitación denominada "Camino a la Felicidad", a cargo de la Fundación Libertad y el Despacho de la Primera Dama, como parte de su proceso de resocialización.
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