Su fe en Dios lo mantuvo vivo. Arropado con una sábana en un pequeño cuarto donde el frío producido por el aire acondicionado era irresistible, Samuel Espinosa, de 32 años, único sobreviviente al estallido del edificio Matrix Towers el pasado 13 de agosto, recibió a DIAaDIA para expresarle la dicha que siente de estar vivo.

Espinosa relató que a pesar de haber estado en una experiencia tan difícil que prefiere no recordar, el amor de su familia y amigos, que nunca desfallecieron ante la situación tan delicada en la que estuvo, lo mantuvieron vivo.

Él profesa la religión evangélica y dijo que los cultos y oraciones por su salud fueron pieza clave para su recuperación.

Antes del accidente, él se desempeñó por siete años como técnico de la empresa Tropigas, con lo que mantenía a sus dos hijos y esposa. Ahora no quiere pensar en qué va a hacer para subsistir. Afirmó que solo quiere recuperarse y dejar todo lo sucedido en las manos de Dios.

El sobreviviente mandó un mensaje a los familiares de las víctimas: "Que busquen la fuerza en Dios y que sepan que él ora por ellos todos los días de su vida". Por el estado delicado de las heridas, Espinosa tiene que mantenerse arropado y en un cuarto con aire acondicionando, además debe hidratar sus heridas constantemente, acudir a las citas con el cirujano plástico y no ausentarse de las fisioterapias para mejorar su estado de salud.