A pesar de que la mayoría de los locales en el Barrio Chino estaba abierto, no se veía a mucha gente. (Foto: ROBERTO BARRIOS y ERICK BARRIOS / EPASA)
Milagros Murillo F.
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"Felicidad para todo el mundo". Eso es lo que desea la sociedad china panameña a todas las personas, especialmente, cuando ayer celebraron los 60 años de República Popular China.
Kito Ching llegó al país hace 46 años, luego de que sus padres decidieran radicarse aquí y aunque la numerosa familia, formada por nueve hijos, se dispersó en países como México, Estados Unidos y España, él prefirió quedarse y formar la suya.
Admitió que no es normal que los chinos radicados en Panamá celebren la independencia de su país, pero dijo que "60 años son 60 años". Además, el hecho de que el año pasado se realizaron las Olimpiadas allá, sirvió para que la cultura se diera más a conocer.
POR QUE CERRARON?
En un recorrido por la popular Avenida B y el Barrio Chino, fue notable que algunos locales de asiáticos estaban cerrados, lo que, según algunas personas, era por "un paro" en desacuerdo con las declaraciones del Presidente sobre la cantidad de chinos ilegales que está entrando al país; sin embargo, el comerciante aclaró que esto es falso, pues los que decidieron cerrar fue por motivos de la celebración. "La gente habla mal y dice que los chinos están en huelga, pero el cierre es realmente por la fiesta", enfatizó.
Aseguró que "la ley es la ley y en todo país las personas tienen que estar legales". Agregó que el momento fue propicio para tomar un descanso bebiendo té, incluso hubo quienes se fueron a pasear en familia a la playa u otros lugares, pues trabajan mucho para poder tener dinero.
Sin embargo, en su natal China sí hay gran fiesta, al menos eso es lo que han visto mediante la Internet.
Explicó que hay quienes dicen que los asiáticos tienen plata, pero no se ponen a ver que deben sacrificarse y esforzarse mucho en sus negocios para ver los frutos. Por ejemplo, las generaciones pasadas trabajaban hasta 15 horas diarias.
¿PARO?
Los chinos en Panamá desmienten que hayan cerrado sus locales como una medida de presión.